30 de octubre de 2017

Una larga espera

Los meses pasan y a pesar de mi renuencia, vuelvo a este espacio donde puedo dar orden a mi locura para entender un poco de lo que ocurre dentro. La voz de Ana persiste y poco a poco me acerco al umbral de una recaída. Otra. Una más en la cuenta de la vida. Es curioso cómo Ana de forma paulatina va erigiendo un cerco que aparta a los demás y me sume en el silencio nuevamente. Pero hablamos de la palabra hablada. Ana a menudo olvida que me he valido de la palabra escrita para no caer en picada.

1 de marzo de 2017

La recaída

Ana despierta después de un letargo de apenas unos meses. Llevo días sintiendo cómo se apodera nuevamente de esta anatomía que se ha dejado llevar por la locura. Su voz apenas es un susurro, pero evoca viejas memorias que duelen demasiado para ser escritas por este medio. No sé si tengo voluntad para resistir otro embate. Esto de las recaídas es tan complicado.