Después de tanto trámite inútil en un mundo burocratizado, creí que todo había terminado, de momento. Sin embargo, los problemas se atren unos a otros sin descanso. No pensé que los sinodales que escogí me fueran a causar confictos, pero no fue así. Resulta que no se hablan entre sí, hay pleitos políticos y personales que al momento de deliberar podrían afectarme en la unanimidad y la mención honorífica. Sin pensar en las consecuencias, mi decisión puso en riesgo mi trayetoria académica, y quizás lo principal fue que los profesores, todos, sin exepción, tenían altas espectativas sobre m trabajo. No obstante, al parecer mi trabajo los decepcionó. Me gustaría que entendieran que mi investigación no fue hecha para otros, sino para mí, para explicarme el fenómeno que analizo, no para exlicarlo a los otros. Fue un trbajo personal completamente, en el sentido de que todo lo que escribí y cité er para mí, nunca pensé en los otros, en los lectores. Ése fue un gran error de mi parte, y no sé cómo explicarlo, es más, no sé si es conveniene decirlo en el examen. Entiendo su decepción, pero nunca pretendí crear tales espectativas en ellos. Probablemente fui un alumno destacado y di mucho de mi en la carrera, pero en mi trabajo de tesis no figuró esa quimera que todos conocían. Es un trabajo sencillo, modesto, que incluso parece escrito sólo para pasar e examen y punto, que no tendrá trascendencia ni continuidad. Pero no es así. Me interesa mucho ese fenómeno, pero para un trabajo de lienciatura está bien, entre menos ambicioso es mejor. Abodar algo más complicado, complejo, quizás hubiera requerido seis meses más de trabajo, pero hubiera podido sacarlo sin problemas, pero ése no era mi objetivo. Lo sé, tal vez hago una tormenta en un vaso, no s tan complicado. El problema es que no sé cómo defender mi trabajo. No creí en él hasta que lo vi impreso y empastado... Qué dilema... En cierta forma doy gracias a que tengo tantas ocupaciones en la cabeza para no ponerme a pensar en otras desventuras. No tengo de momento un proyecto de vida, me limito a vivir lo inmediato, aunque es preferible que desde ahora m proponga ciertos objetivos a mediano y largo plazo para empezar a construir "algo" en m vida. Quizás ese algo sea frívolo, o tal vez alguien más. ¿Necesidad de apegarme al mundo a través del amor? Es probable, pero no totalmente cierto. Hay otras formas en las que deseo arraigar en el mundo, dejar mi huella, como vulgarmente se dice. Entre esas estrategias figura la literatura. No quisiera morir sin antes publicar un libro, pero como no quiero publicar cualquier cosa, sigo escribiendo, proponiéndome retos, mateniendo el ejercicio de la escritura. Hasta que tenga la chispa, que sienta que tal o cual texto es el adecuado, entonces empezaré a publica, antes no. Tal vez suena a pretensión, pero es algo que me exijo, que le exijo a mi trabajo, no quiero ser la quimera mediocre que publica cualquier cosa como hacen tantos que se creen poetas y narradores... No, no soy patético en ese aspecto, al menos tengo lo pies en la tierra para decir qué cosa está bien o mal en mi escritura. Sé que necesito más temas, ya descubrí mi línea, sólo me falta el motivo, y espero que la próxima semana surja después de lo que haré...
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